domingo, 15 de octubre de 2023

Ahora Madrid

Madrid tan robusta, tan dura, tan fuerte su grito, impasible ante todos los cambios, los años, los reencuentros, las despedidas.
Albergando siempre la grandeza de todos los sentimientos de quienes la habitamos, visitamos, o caemos de paso.

Madrid siempre me enamoró, pero también me dolió mucho y sigue enamorándome tras tantos años, cómo si de una relación tóxica se tratase.
No estoy con ella pero no dejo de mirarla siempre, de sentir cosas, de quitármela de la cabeza.

Pero también me sigue doliendo muchísimo.
Madrid es principio siempre de cosas,te da la bienvenida siempre , tan social, pero a su vez sabe a despedida, de las duras, de las crueles, huele a soledad, a final....Madrid es el final.

"La"miro y me invita a pasearla pero también me da miedo tomarla de la mano.
Noto en cada una de sus esquinas y rincones la carga de sus viandantes, el dolor de sus ausencias, la tristeza de las miradas, la sordera de sus lamentos.
Joder cuanto me duele.

Me paraliza, no sé si quedarme o irme, si decirle hola o adiós, porque no sé si allá afuera será mejor o peor o si mi dolor sanará o aumentará.

Es frío aunque todos se empeñen en disfrazar su frialdad de frenética temperatura. Sus cuerpos están morenos, los corazones helados.

No sé si merece que deje mis lagrimas caer en su asfalto gris o llevármelas lejos de aquí.

Tengo Miedo, siempre lo tengo, pero aquí parece que el detector de sus causas aquí marqué su kilómetro cero.

Desoladora esperanza, hondo pesar de decepción, irrecuperable.

Me muero.

No encontraré paz ni aquí ni allá.


Madrid sincericida. Me haces daño.

No eres tú, soy yo.