Nadie supo frenar Enero, nadie.
Y un año más llego a nuestras vidas, una suma más en tu camino, te guste o no, aquí estamos rodeados de copas dulces y polvorones con un empacho de propósitos y resaca de anhelos.
Todo un año deseando lo que tienes ahora, al fin te ha llegado pero llega también Enero y te recuerda que no lo pudo retener nada ni nadie.
¿ Es Enero solo un mes en el calendario ? o ¿ es el nombre de una batalla con la que luchas todo el año ?
Nos pasamos la vida esperando tener, alcanzar felicidad, nos empeñamos en ganar la carrera cuanto antes a toda costa y fijamos Enero por ejemplo como el mes de los propósitos, los que acaban y los que empiezan y se nos olvida aquello de que lo importante es participar.
Y llega Enero, y a los que han conseguido sus propósitos, les entra una melancolía inmensa al darse cuenta que aun necesitan más para quedarse satisfechos y se baten en duelo otro año más en la batalla.
Y así año tras año, y cuando se quieren dar cuenta, los años pasan y lo que tanto perseguías ya no es lo que querías y lo que fue y ya no sera quizá era super bueno y por andar empeñado en otras cosas no lo supiste disfrutar.
La vida cambia, las mentes evolucionan, las personas nos modificamos, y con todo ello los propósitos.
Es en ti donde debes fijar esa meta y no en lo que te rodea. Si consigues encontrar la meta dentro de ti, ya puedes bailar cada día con la soledad que nadie sera más feliz que tú.
Siempre siempre, he dicho que lo único que pasa es el tiempo y que quien espera desespera, y que tenemos que aplicar más la practica de valorar lo que somos y tenemos ahora, y dejar la teoría para los que vengan, que ya nos la sabemos todos.
Todo esto puede sonar en según que aspectos lo apliques un poco contradictorio para el alma de un romántico.
Si lo aplicamos al amor por ejemplo...una persona libre e independiente pero romántica hasta las venas, que esta sufrida por no tener a alguien al lado constantemente dando calor a su vida podría estar empeñada en encontrar eso todo el año y una vez le llegase, darse cuenta por esa regla de tres, que ni el amor supo frenar enero, porque ahora que tiene ese amor, necesita verse en otras metas con la persona, o quizás eche en falta, ese sufrimiento hasta casi divertido en aquel empeño por encontrar el amor en el que tanto nos equivocamos pero tantas anécdotas nos deja.
Y repito aplicado a ese terreno, podría concluirse en que nadie, ni el más grande amor supo frenar Enero... pero ¿ es malo eso ?
En absoluto, el malo es tu habito y manía en fijar a enero tus frustraciones por no saber aceptar el paso del tiempo.
Por eso para no tener que anhelar nada, disfruta mucho hasta la saciedad el momento que estés viviendo ahora, aquí, ahora mismo, da igual si es bueno o malo, si estas riendo o llorando.
Me comentaba una amiga que entendía perfectamente esa lucha de libertad y amor.
Pero no me hagas mucho caso, pierdes el tiempo en leerme.
Cierra esto y vete corriendo a encontrar a alguien que sepa frenar Enero del 2017, ya estas tardando, y mientras tanto si eres una persona perdida, aprovecha ese proceso, pues es lo de lo más productivo para poner en practica, toda la teórica de auto ayuda que tanto nos sabemos.
Un abrazo grande y feliz año.
