Brujulear

Discernir entre vagar o divagar , vago cuando estoy frente a sus ojos, divago cuando los mismos me miran.

Me gustan muchas cosas, quisiera volar sin miedo a morir, no caer en la cuenta de que no tengo unas alas de gaviota siquiera.

Existe la manera de hacerlo y no cesaré en mi empeño de encontrarla y una vez lo haga, correré bien firme mis últimos pasos en tierra, te dejaré el manual por si quieres algún día o al menos alguna vez, acompañarme en el vuelo.

Te enseñare las pistas tan pronto como quieras, tan tarde como haga falta, da igual deprisa que lento, no tengo reloj...y aunque vivas entre las agujas de uno,

quédate con las horas que marquen tu momento y deja que el tiempo vaya a la velocidad que quiera.

Despojarse de tu identidad, desnudar el color de tu estrategia, conquistar sin más, cuando estás, cuando estoy , cuando es.

Amar es una casualidad del destino, pero siempre digo que enamorarse es otra cosa, volver a discernir en este punto entre amar y enamorarse.

Enamorarse es una elección, tú me eliges , yo te elijo y los dos sonreímos,compartimos y bailamos el baile que borra los problemas con nuevos pasos.

Amar te hace vagar, enamorarse ,divagar he ahí la cuestión , he ahí lo que discierne.

Pero no me hagas caso, busca tus alas, vaga en tu mente,divaga en tu corazón y habla sin tiempo.

Cada quien posee un poder para descubrir una mágica formula...

Hay veces que es mejor no buscar respuestas porque no las hay, no existen pero quizás tú las encuentres todas o tal vez te conviertas en el creador de respuestas a preguntas que nunca nadie se planteó.

Yo jamás dejaré de amar, de enamorarme, de andar vagando en miradas, divagando en labios, tratando de encontrar las preguntas y respuestas al amor que me eviten tantas incógnitas.

Nunca dejaré de brujulear.

¿Sabías que la palabra brujulear esta incluida en el diccionario para definir todas las formas posibles de intentar encontrar la forma a algo?

Pues existe...y me encanta.